El Otro yo en El Pepsi Music

Durante todo el festival, en los escenarios principales, se han presentado bandas de peso, con lugares ganados y años de experiencia. A partir de ese bagaje teórico, conceptual y, hasta por qué no, anímico, las distintas actuaciones han sido correctas y muy convincentes. Más allá de los gustos personales, nadie desentonó o, por decirlo de otra manera, pasó un verdadero papelón. Tal vez, las diferencias existentes se relacionen directamente con el momento actual de cada artista.

Hace algunas semanas, El Otro Yo inició una nueva gira interminable. Tocar y tocar, casi todos los días, afina y oculta cualquier tropezón. Por eso, esta noche, EOY marcó diferencia. Antes del animal, los hermanos Aldana brindaron un show energético y bastante roquero.

Pasaditas las nueve de la noche, la rebelión empezaba con Corta el Pasto y Alegría. A esa altura, el campo se había poblado de rostros maquillados y de ojos multicolor. Autodestrucción multiplicaba adeptos y, desde arriba, Ray intentaba destruir parte del mobiliario; por suerte, semejante cruzada finalizó segundos después de su inicio formal. La música y 10.000.000 aplastaron dudas y originaron una tremenda escalada final. Locomotora, de Fuera del Tiempo y No me importa morir robaron las reservas y las fuerzas del público terminaron por agotarse.

Mucha energía, una lista poderosa y el record mundial de jóvenes lanzados para arriba fueron los condimentos claves de esta actuación de El Otro Yo en el Pepsi Music 2007